EVANGELIO
Ciertos personajes de nuestras comarcas se hacen populares por sus excentricidades ,
carácter ingenuo y una constante condición del ánimo para el humor. A esa
categoría pertenecía Evangelio, incansable andariego que recorría las calles de
Las Mercedes del Llano desde el amanecer hasta más allá del ocaso. A veces sus
caminatas traspasaban las fronteras del pueblo, para luego reaparecer
repentinamente como esos héroes fabulosos de los cuentos infantiles.
Desde que partía de su domicilio, por allá bajo unos acogedores
almendrones, Evangelio siempre se encontró con algún buen samaritano mercedense
para conjurar los fantasmas de la indigencia. Nuestro personaje, entonces,pronunciaba
una ristra hilarante de palabras en agradecimiento.
En muchas ocasiones esta sarta de vocablos era una larga enumeración de los
componentes de algún menú de su preferencia.
Descansa en paz, estimado amigo.
Los mercedenses siempre te recordaremos con una
sonrisa.
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